La química está presente en todo lo que nos rodea, como el agua que bebemos, la tierra que pisamos o nosotros mismos. Hay química en el concreto con el que se hacen los edificios, así como en la forma en la que almacenan energía las baterías de los celulares. También en las cosas que no podemos ver, como las bacterias y el resto del submundo microscópico. Y es que la química ocurre en una escala de tamaño mucho más pequeña. La materia es una combinación de átomos y moléculas que forman estructuras determinadas, y la química es la disciplina que se encarga de entenderla y transformarla. Los y las químicas buscan respuestas en el mundo de lo inerte y de lo orgánico, y pueden aportar conocimientos que utilizarán la medicina, la industria o que sirvan para mejorar el medioambiente.
¿QUÉ ES Y QUÉ HACE UN QUÍMICO?
Muchas veces la química se asocia a la carrera de Bioquímica (que no se cursa en la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales), cuyo principal campo de acción está en las enfermedades humanas. Tradicionalmente, los bioquímicos trabajan de manera estrecha con los médicos, ya que están en condiciones de dirigir laboratorios de análisis clínicos. Si bien una/a Licenciado/a en Cs. Químicas pueden trabajar en temas de salud humana e incluso obtener la matrícula profesional para realizar todo tipo de análisis clínicos, su formación no está orientada solamente a estos temas. Al ser más amplia, le permite trabajar en otras áreas completamente distintas, como la petroquímica o la industria alimentaria.
Los ingenieros químicos están abocados al diseño de reactores y de plantas químicas. Si bien comprenden en líneas generales la naturaleza de los procesos a escala molecular que ocurren en dichos reactores, no se dedican a estudiarlos, como sí hacen los/las Licenciados/as en Ciencias Químicas de Exactas.